Oro y platino literalmente llovieron del cielo en Siberia la semana pasada cuando un despegue de rutina desde un aeropuerto ruso salió muy, muy mal.
El avión de carga AN-12 de Nimbus Airlines llevaba diez toneladas, o un valor estimado de $ 378 millones en oro, platino y diamantes pertenecientes a la compañía minera canadiense Kinross Gold . Mientras despegaba del aeropuerto de Yakutsk el 15 de marzo, se abrió la compuerta de carga del avión, derramando casi 200 barras de oro y platino que pesaban un total de alrededor de 3,4 toneladas.
Según los informes, la mayoría de los bares aterrizaron en la pista del aeropuerto de Yakutsk, aunque el avión voló otras 10 millas antes de realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Magan, dejando caer más barras de oro en el camino.

Según la agencia de noticias rusa TASS, la tripulación de tierra en el aeropuerto puede no haber asegurado la carga correctamente. Afortunadamente, nadie fue golpeado o herido por la caída de barras de 44 libras. Tampoco hubo daño estructural, ya que ninguno de los bares golpeó ningún vehículo o estructura.

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